El caso del abogado Carlos Ovidio Acevedo Navas dio un giro inesperado este 13 de octubre, luego de que la Sala Tercera de Apelaciones emitiera una resolución que revocó sus medidas sustitutivas y ordenó su prisión preventiva.
Acevedo, señalado por su participación en un incidente ocurrido el pasado 25 de septiembre, donde resultó afectado un estudiante motorista, enfrentará ahora el proceso tras las rejas mientras avanzan las investigaciones.
la justicia cambia el rumbo del caso
El tribunal analizó las pruebas y determinó que existían suficientes elementos para modificar la calificación legal del hecho, lo que llevó a revocar la libertad condicional que había sido otorgada en audiencias anteriores.
🧑⚖️ La resolución sorprendió a muchos, pues el abogado había logrado medidas sustitutivas que incluían arresto domiciliario, arraigo nacional y fianza económica.
Sin embargo, con esta nueva decisión, Acevedo deberá permanecer en un centro carcelario mientras el Ministerio Público (MP) continúa recopilando evidencias y testimonios.
la reacción ciudadana
La noticia rápidamente se viralizó en redes sociales. Miles de usuarios aplaudieron la decisión judicial, considerando que la ley debe aplicarse sin privilegios.
“Por fin una resolución justa. Que pague como cualquier ciudadano”, escribió un internauta en Facebook.
“Si hubiera sido otro, ya estaría preso desde el primer día. La justicia no debe tener apellido”, comentó otra usuaria.
el estado del estudiante afectado
Mientras tanto, el joven Larkin Daniel Morales continúa en proceso de recuperación en el Hospital General San Juan de Dios 🏥.
Su familia ha reiterado que su prioridad es la salud del estudiante y confía en que el sistema judicial hará justicia sin presiones externas.
De acuerdo con su madre, Mónica Cuque, “mi hijo sigue estable, pero será un proceso largo. Solo queremos que se cumpla la ley”.
un caso que mantiene la atención nacional
El expediente de Acevedo Navas continuará bajo revisión en las próximas semanas.
De confirmarse su responsabilidad, podría enfrentar una condena considerable, lo que pondría fin a su carrera profesional y lo dejaría tras las rejas durante sus últimos años de vida.