Panadería ofrece apoyo en el #8M, pero su gesto es rechazado
En un esfuerzo por mostrar apoyo a la conmemoración del Día Internacional de la Mujer, una reconocida panadería ubicada en la 6ta Avenida de la zona 1 decidió ofrecer productos gratuitos a las participantes de la marcha #8M. Sin embargo, lo que comenzó como un gesto de solidaridad terminó en un incidente que ha generado debate en redes sociales y entre la opinión pública.
Un acto de apoyo en el Día Internacional de la Mujer
Cada 8 de marzo, miles de mujeres se movilizan en distintas ciudades del mundo para exigir derechos, equidad e igualdad de oportunidades. En esta ocasión, la Panadería San Martín quiso sumarse a la jornada ofreciendo pan, bebidas y otros productos a las manifestantes. Las mesas fueron instaladas a las afueras del local, con el propósito de brindar un pequeño respiro a quienes participaron en la marcha.
El establecimiento, reconocido por su constante apoyo a diversas causas sociales, buscó generar un espacio de encuentro y diálogo con esta iniciativa. Sin embargo, la respuesta de algunos grupos dentro de la manifestación tomó un giro inesperado, transformando la situación en un episodio de tensión y descontento.
🔴 #VIDEO | Panadería San Martín, ubicado en la 6ta Avenida de la zona 1 de la Ciudad de Guatemala, preparó mesas con producto para regalar a las participantes durante la marcha #8M.
— Noticias Del Atlántico (@Noti_Atlantico) March 8, 2025
Si embargo nuevamente arremetieron contra el restaurante, tirando las mesas y pintando la pared. pic.twitter.com/b0OYXmlO8V
Rechazo y actos de vandalismo
A pesar de la intención de apoyo, un grupo de manifestantes reaccionó de manera negativa ante la presencia de la panadería en la marcha. En cuestión de minutos, las mesas con los productos fueron derribadas y los alimentos quedaron esparcidos en el suelo. Testigos relataron que el acto fue acompañado de gritos y consignas que reflejaban la desconfianza hacia las empresas y el sistema económico.
Además, la fachada del local fue intervenida con grafitis, en los que se plasmaron mensajes de protesta. Esta situación generó la reacción inmediata de los transeúntes y otros participantes de la marcha, quienes se mostraron sorprendidos ante la escena.
Reacciones de la comunidad y redes sociales
El incidente no pasó desapercibido en redes sociales, donde múltiples usuarios compartieron imágenes y videos de lo ocurrido. Las opiniones se dividieron rápidamente entre quienes criticaron el rechazo al gesto de la panadería y aquellos que justificaron la reacción argumentando que la lucha feminista no debe ser utilizada como estrategia de marketing.
Algunas mujeres participantes de la marcha lamentaron lo ocurrido y expresaron que este tipo de actos desvirtúan el propósito de la movilización.
«No podemos permitir que se confunda la lucha con la destrucción. Agradecemos el apoyo de quienes realmente nos respaldan«, comentó una usuaria en redes sociales.
Por otro lado, diversas organizaciones feministas emitieron comunicados en los que recalcaron la importancia de mantener el enfoque en las demandas principales del movimiento. Al mismo tiempo, destacaron que las acciones individuales no representan el sentir general de todas las participantes.
Llamado a la reflexión y respeto mutuo
Los eventos del #8M han sido históricamente espacios de expresión y denuncia, pero también han generado debates sobre la forma en que deben llevarse a cabo las protestas. En este caso, el incidente con la panadería plantea interrogantes sobre la relación entre el activismo y el apoyo del sector privado a causas sociales.
Mientras la panadería aún no ha emitido un pronunciamiento oficial, muchos esperan que esta situación sirva como un llamado a la reflexión sobre la importancia de la tolerancia y el respeto mutuo. La conmemoración del Día Internacional de la Mujer sigue siendo una fecha clave para la lucha por la igualdad, y la manera en que se desarrollan las manifestaciones sigue siendo un tema de discusión en la sociedad.
La comunidad, tanto en redes como en el entorno urbano, continúa analizando lo sucedido. Sin duda, este episodio será recordado como un punto de inflexión en la relación entre las iniciativas privadas y el activismo social, destacando la necesidad de diálogo y entendimiento en la construcción de una sociedad más justa e inclusiva.
